Una guerra de poder escondida de salvación mundial

Hace cinco años Estados Unidos le declaro guerra a Irak uniéndose con otras naciones como Gran Bretaña, Polonia, Portugal y España con el fin de desarmar a Irak al que se la acusaba de tener armas nucleares, esconder terroristas y liberar a un pueblo “oprimido”. Esto ocurrió después del atentado a las torres gemelas, el 11 de Septiembre del 2001, en el que el terror causado por estos terroristas le dio a George W. Bush el poder para aliarse con otros países con el fin de buscar la seguridad y acabar con los atentados que tantas vidas de inocentes se habían llevado. La alianza lograda y el miedo colectivo hizo expedita la guerra y pasar por alto los medios ocupados en esta y las intenciones individuales. La forma en que esta guerra se llevo a cabo es la manera que según Maquiavelo lleva al éxito y mantencion del poder del Estado buscando, con apoyo tanto interno como externo, un fin común para lograr hacer ver las crueldades como algo licito al ser bien empleadas procurando que su aplicación represente un claro beneficio para sus súbditos. Esto claramente consolida sus dominios pudiendo él aprovecharse de esta situación para ir por otros fines que, si se hubieran planteado de otra manera y en otro momento histórico, no hubiera podido lograr el apoyo externo del que todo gobernante, en esa situación, necesita para no ser combatido por otros gobiernos o que se provoquen guerras civiles que derroquen el poder y le impidan al gobernante hacerse mas poderoso al mantener a su pueblo seguro y con aparentes imprescindibles beneficios. Esto a producido que los fines secundarios como el apropiamiento de los yacimientos de petróleo y el ajuste de cuentas con un enemigo publico peligroso que fue antes amigo y al que se le ayudo en el pasado no sean realmente cuestionados por el convencimiento de que el ataque feroz y sangriento de Estados Unidos les traerá la seguridad perdida sin juzgar los hechos anteriores que podrían ser la real causa de el conflicto y que este talvez solo podría llevar a mas represalias. Y ni pensar este pueblo que llora a su gente y piden justicia por un derramamiento de sangre de civiles por hombres inescrupulosos sin razones reales solo por un odio injustificado, que en el pasado y después de esta guerra la crueldad y aprovechamiento de esta gente a sido inmoral matándose musulmanes sin miramientos de humanidad respaldados y en extremadamente mas cantidades que las muertas por los estadounidenses del 11. Pero el satanismo que se le dio a esta gente, las alianzas internas como en el exterior, el subimiento del miedo, la forma en que se vio que era un derramamiento de sangre para dar fin a un mal y que esto llevaría a beneficios a lo largo del tiempo. Camila Acevedo – ace.camila@gmail.com